Tu madre es pura...

Forrado de carne y vino del tinto, si a eso le agregamos familia, un par de canciones picaronas y uno que otro lagrimeo de emoción concluiremos que: tuo weno el 18.
Ante la fomedad de los Figueroa, me animé con los Solorza. Que son los que veo 2 veces al año, y siempre unidos por las festividades que acarrean mucho que comer y beber.
No faltó la chilena cueca que hace mucho no bailaba. Luego de dar una par de zapateos pense que podria postular a estos programas nuevos de baile, pero al empuñar el 42343254 vaso, desistí de la idea.
Aunque se bebe con cierto resquemor porque está tu familia. Bebí moderadamente, no así un primo que luego de ver a su padre despues de 7 años y a su hermana (mi prima), se largó a llorar. Mi tio (El mismo que mencione antes) igual le aplico a la lagrima. Me vi forzado a escuchar los discursos de borracho. Me abrazaba y decia: "puta q tay grande weon. la ultima vez que te vi, toavia te meabai" Que sincero y que genético.
El mayor miedo que me da con estas fiestas, es el Tata. Hombre que ya camina lerdo, como la canción de Piero. El viejito se pone a bailar cueca y siempre al empezar el zapateo, se pone tieso y mira hacia la nada...es ahi donde todos pensamos: Se nos vaaaaaaa...
Pero milagrosamente no se nos va. Es que no se puede ir...porque momentos como estos hay que vivirlos. Rozaría lo chanta si se va cuando estamos todos juntos. Porque simplemente nadie debe morir y perderse el 18.