A venir

La visita a Conce fue un paseo vacacional a esa ciudad en donde me di cuenta la clase de guapezas que existen en esa ciudad. Como decia una por ahí yo no soy tan jote pero joteo igual, un poco disimulado. No sé si eso es bueno… En serio que no sé.
Me gusta la palabra guapa. Es una transición entre la mijita rica y el siútico hermosa o linda. Y además a los chilenos nos gusta las transciones, así hay que aprovecharlas.

Como lo señalé, Concepción estaba este verano con mucha mujer guapa por sus calles. Eso es un punto a favor para la ciudad que después de todo no es lo más feo que hay. Porque por naturaleza a mi todo me aburre en cierto punto y Conce no es la excepción, me aburre en algún punto del calendario universitario.
La pensión en donde estaré este tercer año en la universidad (como tanto, estoy tan viejo) es céntrica, con una ventana grande y quince otros estudiantes. Es nuevo para mi esto así que le da el toque sabroso. Nunca es tarde para estas cosas.
Acostumbrarse a no hacer ruido, a limitar las visitas extrañas, a no llevar gente a dormir, a compartir cocina y baño. Aspectos que pueden sonar aterradores para algunos pero hay que ser mente positiva, aunque me cueste. Creo que todo será normal este año y paf paf paf. Nada puede ser más malo que el 2007.
Es extraño, no suelo ser el huevón positivo. A lo mejor debe ser porque estoy escuchando Coldplay y me transmite esa onda: Todo será lindo mañana, buena onda, los pajaros cantarán, tu familia reirá junta, no tendrás atado con tus viejos, administrarás tu tiempo y quien sabe si hasta te encuentras un billete en la calle. No es malo soñar a veces.